Las flores y la naturaleza aquí son como en un cuento de hadas. Todas las viviendas están abiertas y decoradas con hermosas flores. Aquí el ser humano brilla como un sol y solo se conoce la cordialidad y el amor. Las viviendas espirituales están abiertas y decoradas con flores. Todos quieren servir, pero solo cuando el ser humano se ha liberado completamente de sus sentimientos terrenales inferiores puede recibir una tarea.
-Había hombres y mujeres juntos y todos radiaban como soles. Caminaban por la naturaleza y desde lejos sentía su felicidad.
El ciclo del alma – A las esferas de luz p.263
-A mi alrededor había flores y la naturaleza era como de ensueño. Estaba en el paraíso y yacía en una vivienda abierta y decorada con las flores de las esferas.
– De modo que una morada espiritual es como siente el hombre y según lo que posea de fuerza del amor.
-En su vivienda hay habitaciones donde puede conectarse. Está la habitación de la oración, de la fe, de la esperanza y de la confianza, en suma, la de todos los rasgos que posee el hombre.
El ciclo del alma – Tomé posesión de mi propia esfera; formación espiritual p.265, 266
-Solo habrá cordialidad y amor, comprensión.
Conferencias 1 – El ser humano y su mundo astral p.349
-Todo lo que vive aquí ha entrado en un estado de transición, y el ser humano siente conexión con una sintonización elevada. La naturaleza, el ser humano se abrirá a una vida elevada. Y la posesión de eso es la fuerza de los sentimientos elevada de todo.
-Aquí tendrán que deponerse a ellos mismos, para más adelante, en la tercera esfera, entrar para siempre en la vida eterna.
Una mirada en el más allá – Primera, segunda y tercera esfera p.350
-Cada ser humano en la primera esfera espera que se le conceda servir y ahora es posible, pero todavía no hemos llegado a ese punto. Primero el ser humano tiene que liberarse de los rasgos inferiores antes de que los maestros de las esferas de luz puedan darle una tarea. Pero es posible.
La cosmología de Jozef Rulof 5 – Los siete grados de vida espirituales conscientes e inconscientes para el alma p.205
Citas de los libros de Jozef Rulof