La forma en que hablas, piensas y actúas en tu vida diaria se construye en el pasado en todas las vidas pasadas y se almacena en nuestro subconsciente.
Nuestra conciencia diurna es la capa superior de nuestro subconsciente.
Nuestra vida de sentimientos acumulada reacciona en nuestra conciencia diurna.
Hay siete profundidades de sentimiento, y la más alta, la séptima, es la conciencia diurna en el subconsciente.
Tus sentimientos acumulados forman tu personalidad
– Cuando usted sabe que todos sus actos y sentimientos son una posesión del pasado y que por eso usted vive y experimenta la conciencia diurna, y que además crea y recibe y actúa y ve y escucha, y que esos sentimientos configuran su personalidad entera, entonces podrá aceptar que el alma también vive en la conciencia diurna en el pasado.
¿Le ha quedado claro que su alma aún no asimiló nada en esta vida? ¿Que se afana usted en construir, crear y servir, y que en eso aún no ha ganado nada? ¿Cuáles son los nuevos rasgos que asimiló en esta vida? Busque en su propio interior, descienda allí, o “vaya adentro” y mire bien y con claridad si esto es así y aceptará que usted y todos quienes están en la tierra viven en su propio pasado y que se nutren de él.
¿Es eso antinatural? Antes que nada, compruebe quién es usted y en qué se ha convertido ahora. ¿Ha habido cambios en eso?
Entre la vida y la muerte p.176, 177 (BE.4797.4804)
– Porque uno habla y piensa y siente en y desde el pasado. De modo que solo está el “ahora”, eso es y sigue siendo, no hay pasado, “la vida” es, y en eso usted tiene ahora conciencia. Pero solo de aquello que configura su propia vida.
Entre la vida y la muerte p.177 (BE.4814.4816)
– Ahora tiene que empezar usted por: el subconsciente es sentimiento. Y esos sentimientos reaccionan en la conciencia diurna. Sí se habla de subconsciente, pero, oiga, en el fondo no existe. Porque los sentimientos representan el subconsciente, ambas cosas.
Preguntas y respuestas 4 p.374 (Q4.14473.14476)
Citas de los libros de Jozef Rulof