Lecciones

8.6 La relación cósmica entre padres e hijos

 

El parecido facial de padres e hijos se produce de la siguiente manera:
Al principio, durante el crecimiento en el vientre materno, el rostro del niño se moldea por sus propios sentimientos.

Si existe una fuerte relación kármica con la madre, por ejemplo, entonces este sentimiento de la madre también influirá en la formación del rostro del niño.

-Cuanto más fuerte sea la relación kármica, más se parecerá el niño al progenitor en cuestión.
Esta relación kármica con uno de los progenitores no se limita únicamente al rostro.
La susceptibilidad a ciertas enfermedades o, por el contrario, la resistencia a ciertas enfermedades o dolencias también puede haber sido otorgada al niño por el progenitor al que más se parece.

-También existe una conexión dee los sentimientos natural entre la madre y el nonato.

-Cada alma ha construido su propio carácter en vidas anteriores. Por tanto, el carácter de tu hijo es propio y no puede heredarse de sus padres.
No obstante, el carácter de los hijos puede llegar a parecerse al de los padres porque, por supuesto, existe una influencia a través de la crianza.
Además, los padres atraen a los hijos que están en sintonía con su propia vida emocional.

La Sociedad de la Sabiduría Celestial